Skip to content

Inteligencia Emocional, ¿Cómo aplicarla en el trabajo?

Día a día nos enfrentamos a muchos retos y decisiones, en el ámbito laboral nuestra vida no siempre es
fácil; para crecer profesionalmente, tener mejores oportunidades y gozar de estabilidad económica, es
importante desarrollar la capacidad de manejar correctamente nuestras emociones.
La inteligencia emocional se define como la capacidad de una persona para reconocer, interpretar,
comprender y administrar las emociones, tanto de ella misma como de las personas que la rodean.
Todos los seres humanos tenemos una inteligencia emocional, para desarrollarla solo hay que aprender
a cómo adoptarla y mejorar esa inteligencia.
Un estudio extensivo llevado a cabo por el científico conductual Daniel Goleman, plantea 5 habilidades
básicas que deben desarrollarse para tener una alta inteligencia emocional:

  1. Conciencia de uno mismo.
    El primer paso es comprender las propias emociones. Ser consciente de cómo te ven los demás y cómo
    responden ante ti, y de cómo tus acciones impactan en tu entorno.
  2. Autorregulación.
    Al aprender a reconocer y distinguir las emociones, se puede empezar a manejarlas. Todos tenemos
    nuestros propios pensamientos y opiniones, pero es importante saber cómo y cuándo expresarlos en el
    lugar de trabajo. Evita tomar decisiones impulsivas y actuar por capricho. Pensar antes de actuar.
  3. Motivación.
    Se refiere a la pasión y satisfacción personal, perseguir objetivos para realización propia. Establece
    objetivos realistas pero desafiantes que faciliten tu pasión y deseo personal, para saber cómo y por qué
    motivo trabajas para ti mismo, incluso cuando trabajas para otros.
  4. Empatía.
    La inteligencia emocional no sólo es entenderse a uno mismo, sino hacer un esfuerzo por entender las
    emociones de los demás. En lugar de omitir o invalidar las emociones u opiniones de otras personas si
    no estás de acuerdo con ellas, intenta ver las cosas desde su punto de vista.
  5. Habilidades sociales.
    Son fundamentales para crear relaciones. Se trata de ser accesible, transparente, y asegurarse de que
    las personas con quienes se interactúa se sientan cómodas y escuchadas, es también ser consciente del
    lenguaje corporal, tanto el propio como el de los demás, significa tener la capacidad de “leer entre
    líneas”.

En las habilidades sociales, es importante recordar estos pasos:

  • Escucha a tus colegas.
  • No interrumpas a la gente.
  • Asegúrate de que tus comentarios sean siempre constructivos.
  • Sé abierto y genuino, fomenta lo mismo en los demás.
  • Reconoce cuando tú, o un miembro de tu equipo, se sientan agotados, y toma medidas.
  • Dedica tiempo a las actividades sociales.

    Formas de aplicar la inteligencia emocional en el trabajo
    Ten en cuenta que si aplicas la inteligencia emocional en el trabajo, serán más fáciles tus relaciones
    personales, lograrás las metas que te propongas y el nivel de estrés lo manejarás de la mejor forma.

    A continuación te muestro la forma de poner en práctica lo anterior mencionado en tu lugar de trabajo:
  • Identifica las situaciones que te provoquen estrés o ansiedad.
  • Ten siempre presente cuáles son tus metas.
  • Aléjate de ambientes y personas tóxicas.
  • Enfócate en tu trabajo.

    Todo lo antes visto te puede ayudar en el trabajo para potenciar tu camino y lograr tus metas
    profesionales aplicando inteligencia emocional.